Identidad: Para los habitantes de Ca na Toneta, la identidad no es ninguna abstracción, sino un sentimiento de apego y de afecto a un origen y a una tierra. Es algo natural y sincero. De este respeto por la propia identidad es de donde surge la hospitalidad: el deseo de compartir sabores (y saberes) autóctonos a corazón abierto. ¿Acaso ser hospitalario no consiste en ofrecer a los demás lo mejor que uno tiene en casa? Así es para las hermanas Maria y Teresa Solivellas, que ponen siempre sobre la mesa lo mejor de Mallorca. Empezando por la despensa, que abastecen de productos insulares, y siguiendo por los modos de elaboración, basados en la cocina tradicional, y por las propias recetas, de inspiración popular.